Portafolio de Evidencias
Grupo #4
EVIDENCIA #3
Alfredo Berrocal Hernández
Ana Luisa Rivero es una de las habitantes del pueblo y promotora de las fiestas patronales en honor a San Jerónimo. Escuchó de su bisabuela la historia del santo a caballo y tocando corneta en las montañas que llevan su nombre. Le dedicó estos versos.
Y es que al pintar tú figura
Sabrán a quien me refiero
San Jerónimo bendito
Patrono de los llaneros
De tanto pasar los años
Te me estas poniendo viejo
En las tardes de septiembre
Se oye el joropo altanero
Sale el toro a la corrida
Y el coleador va ligero
En pos de la cola del toro
Para plantarlo en el suelo

Los vecinos de Alajuela tienen fama en toda Costa Rica de ser capaces de cualquier cosa jocosa. Irreverentes, chistosos, jactanciosos, ocurrentes, leales, francos, progresistas, valientes y buenos para poner sobrenombres, son algunas de las definiciones con que se les conoce popularmente.
Pero hubo una vez que hicieron algo increíble. Algo que no tiene nombre y que cualquier otro pueblo sería incapaz de realizar: veneraron a un santo, a San Jerónimo, que sangraba guaro y del cual, lógicamente, los alajuelenses bebían con sed de sabanero guanacasteco en pleno verano.
Tal exudación que significaba meridiana transfixión a la fe católica, apostólica y romana costarricense, ocasionó múltiples escándalos, tan evidentes que se hizo obligatoria la intervención de la policía.
Jamás el milagroso Jerónimo - italiano nacido en el año 331 y que murió en Belén en el 420- pudo sospechar que más de 1.500 años después su imagen divina sería utilizada de tan baja y beoda forma por un pueblo costarricense, lo cual pudo causarle la misma desilusión que sufrió por las decisiones del Concilio de Sárdica y el fracaso en sus aspiraciones al Pontificado.

COMENTARIO
En relación con esta lectura me deja que donde pueden llegar las creencias de las personas de utilizar una imagen de un santo para adorarlo a la vez con un doble sentido donde le besaban el pie por uno de los dedos le salía guaro contrabando. Era el patrono de las fiestas, velas etc. Saber que se formaban los festejos los hombres y algunas mujeres hacían fila para besarle el pie a dicho santo así luego terminar borrachos forman zafarranchos y hasta muertes luego de adorar a san Jerónimo.
Llegar hasta el punto que las autoridades tuvieran que intervenir en las investigaciones de ver que era lo que pasaba por adorar a dicho santo luego venían las discusiones y hasta las muertes de dichas personas que asistían a los festejo.
Este santo era el santo de los llaneros, él era una persona que vivía una vida desordenada fiesta, guaro, mujeres, hasta que un día decidió cambiar entro al cristianismo, ayunos etc. hasta llegar al sacerdocio y luego volverse santo.